Respetado Rey de Yolcos y capitán del Argo, gobierna con templanza y sabiduría en una isla donde reina la calma y todos sus habitantes viven en paz y armonía.

Tras el asesinato de su amada Alcmena durante la celebración de su boda, emprende el viaje en busca del vellocino de oro para poder resucitarla, dejando a su tío al cargo del reino.

Jasón, el protagonista de esta historia, es un temible e intrépido guerrero que puede blandir la espada, la maza y la lanza. Además lleva siempre consigo el aspis Yolco, un regalo de su padre, el escudo con el que se protege con mucha habilidad y destreza durante las batallas.

Hijo de Zeus y todo un héroe de Grecia. Es un viejo y fiel amigo de Jasón, y el encargado de atrapar al asesino de Alcmena.

También perdió a un ser querido y por ello se identifica mucho con Jasón.

Cuando su amigo consigue el beneplácito de los dioses Ares, Apolo, Atenea y Hermes, Jasón y Hércules se embarcan en la búsqueda del vellocino de oro a bordo del Argos, un barco fabricado especialmente para el Rey de Yolcos.

Su descomunal fuerza es la única arma que necesita para el combate, por lo que nunca lo veremos usar ni lanza, ni escudo ni espada alguna.

Cuando era niña quedó huérfana en la selva de Saria. Fue allí donde se convirtió en una solitaría y hábil cazadora gracias a su increible destreza con el arco, y consiguió sobrevivir por su cuenta, sin ayuda de nadie.

Más tarde, al llegar una tribu de centauros a la isla, aceptaron que se uniera a ellos y le enseñaron conocimientos de alquimia.

La joven, que nunca ha salido de la isla, se une a Jasón para poder salvar a su tribu, y luego promete ayudar al héroe en su busqueda del vellocino de oro para devolver a la vida a la amada de éste, asesinanada por los Lingua Nigra, una antigua secta que se creía extinta.

Imparable combatiente gracias a su destreza en el uso de su lanza de doble punta, empieza a labrarse un reputación en la isla de Micenas.

Sus victorias son tan aplastantes que corre el rumor de que es invencible.

Su fama le otorga todo el vino, el dinero y las mujeres que desearía todo hombre, pero en lo más profundo de su ser sabe que ansía algo más. Y es Jasón quien le ofrece lo que quiere y necesita: ser uno de los mejores guerreros de la historia.

Inteligente y audaz, el sátiro Pan es un experimentado viajero que busca la sabiduría, y es conocedor de todos los grandes mitos y leyendas de Grecia.

En sus más de 800 años de vida, sus viajes le llevan en muchas ocasiones de vuelta a la isla de Delfos, donde acompaña al oráculo del dios Apolo a la espera de dar consejo a los visitantes del lugar.

Bendecido por Apolo, y con ayuda de su cayado, puede invocar la luz del Sol para quemar a sus enemigos y curar a los aliados, lo que le convierte en una perfecto e inesperado aliado para Jasón en su busqueda del vellocino de oro.